La mayoría de los cirujanos usan drenajes con la esperanza de prevenir la formación de seromas o hematomas después de una cirugía estética de abdomen.
Los drenajes generalmente se retiran una semana después de la cirugía. A veces, se dejan más tiempo dependiendo de la cantidad y el color del líquido de drenaje. Un drenaje total, de menos de 25 CC de líquido de color amarillo en 24 horas, es un buen indicador para eliminarlo.
Se requiere que los pacientes mantengan un registro de la cantidad diaria de drenaje y color para referencia. Los tubos de drenaje deben ser “ordeñados” varias veces al día para asegurar un flujo ininterrumpido de líquido y evitar el bloqueo. El aumento repentino en la cantidad de drenaje o el oscurecimiento en el color necesita ser referido rápidamente a su cirujano para descartar las causas quirúrgicas.
El uso de la prenda de compresión después de la cirugía ayudará a obliterar la cavidad quirúrgica y reducir la incidencia de seromas. Se supone que las prendas aplican una presión constante uniforme alrededor del área del tronco, independientemente de la posición del paciente.
Bajo circunstancias normales, los fluidos de los tejidos debajo de la solapa abdominal son reabsorbidos nuevamente dentro del cuerpo, pocos días después de la cirugía. A veces, esto puede no ocurrir y estos fluidos gravitan y se acumulan en un saco en la parte inferior del abdomen, llevando así a la formación de Seromas.
Sin embargo, la aparición de Seromas después de la cirugía de abdominoplastia no es algo infrecuente. Pueden ocurrir con el mejor de los cirujanos y tienen una probabilidad de 2-38% de ocurrencia en cualquier lugar. Por lo general son asintomáticos, pero a veces pueden presentarse como un dolor sordo o una protuberancia visible en la zona por encima de la incisión. Algunos pacientes informan de un “cambio de líquido” con un cambio de posición,
Lo mejor es consultar a tu cirujano de inmediato. La mayoría de los seromas se pueden tratar mediante aspiración con aguja. Dependiendo de la cantidad de fluido y la velocidad de su acumulación, la aspiración puede tener que repetirse. Y a veces un drenaje tiene que ser reinsertado bajo anestesia local para que siga el proceso. El uso de la prenda de compresión después de estos procedimientos es obligatorio en todo momento.
En raras ocasiones, los pacientes pueden presentar seromas meses después de la cirugía. Estos tienden a verse amurallados y las medidas conservadoras pueden no funcionar en este momento. En estos casos puede ser necesaria la cirugía para explorar la cavidad y cauterizar o quitar sus paredes para prevenir la re-acumulación de líquidos.
Referencia: Abdominoplastia (Tummy Tuck)